
Según el Consejo de los Alcoholes Destilados de los Estados Unidos, cada vez son más los ciudadanos estadounidenses que apuestan por invertir en whisky pensando en el medio y largo plazo. Una opción sobre la que hablamos hoy.
Del mismo modo que en otras épocas los niños coleccionaban cromos de béisbol que, pasados unos años, se revalorizaban sobremanera, actualmente ha aumentado el número de personas que compra whiskies de ediciones limitadas o características muy concretas que, en un futuro corto, medio o largo, pueden llegar a aumentar su valor de forma muy notable. No en vano, desde 2008 hasta el pasado año, el whisky ha venido experimentando una apreciación del 381,99 %; una auténtica escalada meteórica.

Pero pese a estos principales puntos a favor de invertir en whisky, hay otros que apuntan en contra. Según los expertos, por un lado estaríamos hablando del precio; en los últimos tiempos, dada la creciente demanda de whisky de suma calidad, las ediciones limitadas, especiales o de muy particulares características han visto incrementado su precio exponencialmente tanto a la hora de vender como a la hora de comprar y, en muchos casos, lo han visto incrementado por encima de su coste real.
Por otro lado, los márgenes de beneficio; poseer una botella de whisky por la que es posible sacar beneficio respecto al precio original que se pagó es posible y muy plausible, pero una cuestión importante es encontrarle comprador. Se podría optar por la venta directa a un interesado, ofrecerlo a una casa de subastas o venderlo a una tienda pero, según aseguran los duchos en la materia, el margen de beneficio en una parte importante de los casos se vería mermado.
Sin embargo, y pese a estos puntos no favorables, la posible inseguridad de otro tipo de inversiones y la floreciente situación en el sector de los whiskies, hacen que la compra de este destilado sea una opción para muchos inversores aficionados y no aficionados a él.
En Venezuela este néctar elevo su precio en 600% en dos años.