
El whisky escocés Ardbeg Ten Years Old es uno de los single malt más turbios que se destilan en la zona de Islay. La destilería que lo produce se encuentra situada junto al mar en una pequeña isla de 3.000 habitantes en el suroeste de Escocia.
Para su obtención utilizan malta tostado de secaderos locales que utilizan métodos de ventilación natural. El humo que se acumula en la estancia se impregna en la materia aportándole un aroma ahumado que caracteriza a este single malt. Posteriormente se destila y añeja en barricas de roble especialmente seleccionadas durante 10 años.
Su aroma desprende notas de melón, nueces, cítricos y flore frescas y un ligero aroma a café. En boca es sabroso y ligeramente especiado con un final largo y ahumado.
Ardbeg 10 years old se presenta en una botella oscura de 70 cl con una graduación del 46 %. Ha recibido galardones como el “World Whisky of 2008” otorgado por Jim Murray, autor de ‘La biblia del whisky’.