
La destilería Glenmorangie, cuyos orígenes nos llevan a los celtas, es una de las más norteñas y antiguas de Escocia, así como una de las más pequeñas.
El Glenmorangie Reserva 25 Años es una curiosa maduración en barricas de Roble Americano, barricas de Oloroso Sherry y barricas de Borgoña Francés, cuyos resultados se mezclan después en precisas cantidades.
En nariz, este distinguido malta nos da aroma a frutos secos, cerezas, ciruelas y unas notas a medio camino entre chocolate y café. En boca saboreamos un whisky con cuerpo, con deje a frutas del bosque, y un final cálido y suave.
El Glenmorangie Reserva 25 años se presenta en una botella redondeada de curvas pronunciadas con una capacidad de 70 centilitros. La graduación de este whisky es del 43%.